Marek Brzozowski, nacido en Bydgoszcz, Polonia, en 1952, vive y trabaja actualmente en Ankara, Turquía. Se estableció en esta ciudad después de que unos amigos le convencieran para que visitara el país con ellos. Y de hecho, sus cuadros no solo reflejan la arquitectura de Estambul y Ankara, sino de otras muchas localidades turcas más pequeñas, e incluso detalles como las típicas puertas de Safranbolu y las ventanas de Alaçati.
El pintor, que suele simplificar su nombre y firmar “Brzozo”, ha dedicado numerosos cuadros a ciudades. En “Gato sin nombre” vemos una (también sin nombre) en la enroscada cola del felino. En total hemos encontrado veintisiete cuadros suyos con los gatos como protagonistas o al menos con uno formando parte de la escena.
En la gran mayoría de lienzos aparece la luna, siempre un trozo de luna, creciente o menguante. Según el pintor, la luna representa la libertad de expresión, el poder pintar con total libertad, algo que no le era permitido durante su juventud en Polonia cuando estudiaba en la Academia de Bellas Artes de Gdansk, donde en 1976 se licenció en Diseño Gráfico y desde 1978 a 1989 fue profesor de Diseño Gráfico y Tipografía.
Obtuvo el doctorado en 2000 en dicha Academia a pesar de llevar unos cuantos años viviendo en Turquía.
Asocia los gatos a la luna y en ocasiones a los payasos. Usa colores brillantes, alegres, llenos de vida. En una entrevista comentó que nunca empezaba un cuadro hasta estar seguro de haber logrado los colores idóneos para expresar su idea. Aunque su estilo suele describirse como surrealista, él prefiere llamarlo realismo mágico.
También hizo una serie de gatos con los rabos colocados geométricamente, como en las dos versiones de “Zona segura” o en “Gato acuario”. El humor está presente en muchos de sus cuadros.
Después de trasladarse a Turquía, empezó a dar clases en la Facultad de Arte y Diseño de la Universidad Bilkent a partir del año 1993. También es conocido por sus diseños gráficos y como director artístico para teatro, cine y televisión. Ha obtenido varios premios internacionales por sus carteles e ilustraciones.
Ha participado en numerosas exposiciones colectivas e individuales, tanto en Polonia como en Turquía, sobre todo en la Galería de Arte Doku de Estambul, y en los últimos veinticinco años sus obras se han visto en más de cien exposiciones.
Creemos que Marek Brzozowski tiene gatos, o si no son suyos, debe usar como modelos a los que viven en su barrio. Si se fijan en el gato cuyo rabo envuelve al “Ladrón de luna”, es idéntico al gato sentado en un kilim rojo, tienen la misma mirada, aunque no sean del mismo color.
Algunos gatos son meros esquemas, otros parecen sacados de un cómic, pero la gran mayoría son gatos de carne y hueso, como en “Día y noche” o “La pausa”. Tuvo que convivir con ellos o verlos muy a menudo.
Por desgracia, hay muy poca información disponible sobre este pintor. En un artículo dijo: “Deseo reflejar territorios y paisajes imaginarios, personajes desconocidos y acontecimientos inexistentes”.
Para terminar, queremos incluir un cuadro que nos gustó especialmente en el que se ve un caballo tirando de un carro con una luna creciente sujetando una ciudad coronada por un caballo casa y una luna en el cielo a la que le falta un trozo.