Edith Irene Södergran (4 de abril de 1892 – 24 de junio de 1923) fue una poetisa sueca. Nació en San Petersburgo y vivió casi toda su vida en Finlandia, donde residía una minoría sueca compuesta por campesinos y pescadores, así como funcionarios.
Influenciada por la lectura de Heine y Goethe, escribió en alemán sus primeros poemas, pero después continuó escribiendo en sueco, lengua en la que también se expresaron otros poetas finlandeses. Poco antes de la Primera Guerra Mundial se instaló con su madre en Raivola.
Su primer libro, Dikter (Poemas, 1916), revelaba una nueva voz en la literatura de la época y fue recibido, en algunos casos, con admiración y cierto desconcierto, y en otros, con rechazo. Le siguieron Septemberlyran (Lira de septiembre, 1918) y Rosenaltaret (El altar de las rosas, 1919). En vida de la autora, su obra no gozó de una gran aceptación, posteriormente causó un fuerte impacto en la poesía nórdica, y contribuyó a liberar el verso de los límites impuestos por la rima y el ritmo regular.
La poetisa vio el mundo desde Raivola; allí escribió, sufrió y reflexionó. Los otros habitantes siempre la miraron con curiosidad, pero esa curiosidad en algunas ocasiones se tornó maldad. En el mes de diciembre de 1919, su vecino ruso mató de un tiro a su gato favorito, Totti, también llamado Nonno, Råttikus, Rotteli, Trotteli y Råtte. Totti tiene una estatua conmemorativa.
